Por José Martín
Poza Rica, Ver.- Entre robos, asaltos y amenazas de ser quemados vivos, laboran casi 200 trabajadores petroleros en los municipios de la zona norte de Veracruz.
El señor Rolando Cruz Salazar, uno de los obreros del departamento de reparación de pozos lamentó que los casos sigan impunes y con una profunda crisis que no son atendidas, ni solucionadas por los funcionarios sindicales actuales, así como de la propia empresa Pemex.
Indicó que, a pesar de la inseguridad, el personal sigue sin el apoyo y respaldo por parte de sus dirigentes del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) de la sección 30 y de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Son un promedio de 147 sindicalizados, en diferentes escalafones laborales, quienes son víctimas de índices delictivos mientras trabajan en los yacimientos de hidrocarburos enclavados en terracerías y zonas rurales incomunicadas.
Cruz Salazar narró que los petroleros de la sección 30 han sufrido más de ocho asaltos con armas, golpes y hasta amenazados en los campos que le brindan el servicio de Petróleos Mexicanos en la zona norte de Veracruz.
“Hay compañeros que han sido bañados de diesel y amenazados con prenderles un cerillo hasta morir quemados”, expuso el trabajador de Pemex.
Estos hechos han ocurrido en los campos localizados en la zona conocida como Agua Fría, entre los límites con el estado de Puebla, así como en las áreas de Corralillos y Santa María del municipio de Coatzintla.