Por José Martín
Tihuatlán, Ver.- Desde hace más de 30 años las autoridades estatales no han atendido las plagas que amenazan los cítricos de la zona norte de Veracruz, acusó el delegado de Sanidad Vegetal, Sergio Ruiz Valencia.
Por la falta de atención por parte de los gobiernos pasados, por lo menos tres vectores se propagaron en varias hectáreas de sembradíos, situación que ha generado un colapso en la producción citrícola de la región.
Tan sólo la enfermedad de la mosca de la fruta fue detectada hace más de 40 años, pero los gobiernos nunca atendieron los problemas que enfrentaron los productores. Ahora, el campo también está contaminado por el Virus de la Tristeza de los Cítricos (VTC) y la bacteria del Huanglongbing (HLB) o conocido como el dragón amarillo.
El VTC fue detectado en la zona hace más de 25 años mientras que el HLB rebasa la década, pero tampoco han sido atendidos por los funcionarios e instituciones gubernamentales.
En el caso de la mosca de la fruta se ha propagado, por lo menos, en 28 mil de las 30 mil hectáreas de cítricos que subsisten en Tihuatlán, y las afectaciones indican que sólo el dos por ciento registra una baja incidencia entre los plantíos. Entre las comunidades tihuatecas colindantes con Cazones, entre La Concepción y Acontitla, conocida como zona cero, prevalecen 200 hectáreas infectadas por VTC y HLB.
Sin embargo, no existe un censo real y preciso para conocer el número de citricultores y la cantidad de sembradíos en los municipios de la zona norte de Veracruz.
Ante los problemas y las afectaciones que han causado las plagas, Sergio Ruiz Valencia, quien es ingeniero agrónomo y además cuenta con un posgrado en frutales tropicales, indicó que aspira a ser el presidente de junta estatal “Puerta a la Huasteca Veracruzana” que les permitirá retomar los planes de trabajo para resolver las situaciones críticas que atraviesan los productores de Castillo de Teayo, Tihuatlán, Cazones de Herrera, Coatzintla, Tamiahua y Tuxpan.
Además, otra de las metas prioritarias es que, resolviendo las enfermedades de las plantas, buscará eliminar el veto que tiene la región citrícola, y volver a comercializar los productos en las ciudades como Matamoros y Reynosa, del estado de Tamaulipas, así como en otras regiones fronterizas del país.